El municipio de Santa María Cahabón, Alta Verapaz, territorio ancestral del pueblo Q'eqchi', es atravesado por dos ríos: el Cahabón y el Oxec. El agua de estos ríos, y de una decena de riachuelos, ha sido utilizada históricamente por 195 comunidades del pueblo Q'eqchi' como fuente de subsistencia:

Nosotros vivimos ahí cerca del río. Tengo dos hermanos que les gusta pescar y cuando van, con piedras y armas de fuego los sacan de ahí. Creo que nos están matando, nos están quitando el agua, porque estamos acostumbrados a conseguir nuestros alimentos en el río, como el jute. Nosotros estamos acostumbrados y cuando queremos ir al río ya no podemos. Tenemos que tomar ese agua o toca comprar, pero toca en el pueblo y queda a 45 minutos a pie. (mujer integrante de las comunidades en resistencia de Cahabón)

A lo largo de los últimos 20 años, Alta Verapaz se ha convertido en el departamento del país donde operan más hidroeléctricas, sin embargo también es donde mayor número de habitantes (más del 60%) carecen de servicio eléctrico en sus viviendas. Esta es la gran paradoja del departamento más pobre de Guatemala, con un índice de pobreza del 83.1%, de pobreza extrema del 53.6% y con la cobertura eléctrica más baja del país (44.36%). Estas cifras no parecen corresponderse con la promesa de que el desarrollo de megaproyectos hidroeléctricos mejora las condiciones de vida de las comunidades:

Según lo que dicen ellos, es desarrollo, pero no es desarrollo, es robo de los recursos. Por eso estamos molestas las 195 comunidades afectadas por la hidroeléctrica. (integrante de las comunidades en resistencia de Cahabón)

OXEC

Oxec significa en Q'eqchi': tres sabios que vinieron. Están los 3 cerros pegaditos, es un lugar sagrado y ahí iban a hacer sus ceremonias las comunidades. Dos de esos cerros los destruyó la empresa. En Sepoc, ese es un daño que nadie perdona. (integrante de las comunidades en resistencia de Cahabón)

Lo que hoy sucede con las aguas de OXEC, está lejos de la sabiduría ancestral de los pueblos indígenas. La empresa Oxec S.A., perteneciente al grupo Energy Resource Capital Corporation (ERCC), obtuvo una Licencia ambiental para la construcción de la represa que lleva el mismo nombre. La licencia fue otorgada por el ex ministro Erick Archila, actualmente investigado por casos de lavado de dinero y asociación ilícita y quien se encuentra prófugo de la Justicia. A partir de noviembre de 2015, entró en funcionamiento la hidroeléctrica conocida como “OXEC I” y se continuó en la construcción de la segunda planta, que se prevé entre en funcionamiento en 2018.

En diciembre de 2015, Bernardo Caal, habitante del municipio de Cahabón, interpuso un amparo ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ), exigiendo que se suspendieran los trabajos de la mina, argumentando que la licencia fue otorgada sin realizar una consulta previa.

Según un miembro de la resistencia, OXEC y el Ministerio de Energía y Minas (MEM) intentaron hacer valer como consulta previa, un convenio suscrito en el año 2012 entre la empresa y algunos habitantes de las 11 comunidades “directamente afectadas”, donde estas comunidades se comprometieron a mantener el apoyo incondicional a OXEC, absteniéndose de involucrarse con organizaciones y comunidades opuestas a la hidroeléctrica. La promesa fue que la empresa traería infraestructura, ayudas económicas y empleos, pero nada de esto se cumplió, por el contrario se intensificó la división entre las comunidades:

Nosotros no estamos de acuerdo con que la empresa siga manipulando a nuestros hermanos. A través de engaños están ganando la confianza de la gente. Desde 2012 han ofrecido grandes proyectos y no los cumplen. Se benefician unas cuantas personas, pero los demás siguen igual. Por eso, mucha gente que firmó, ahora ya no confía en la empresa. (integrantes de la Resistencia)

El otro lado del río

Mientras en la capital los recursos judiciales continuaban su cauce, en mayo de 2016 las comunidades de Cahabón solicitaron a la Alcaldía municipal la celebración de la consulta comunitaria, dispuesta en el Código Municipal. El alcalde autorizó la celebración de una consulta con las 195 comunidades del municipio. Ya estaba todo preparado para que las comunidades se pronunciara, pero a solo dos días de celebrarse la consulta, un recurso interpuesto por Oxec S.A., provocó que el titular del Juzgado de Primera Instancia Civil de Cobán la suspendiera.

El debate en la capital continuó

En febrero de 2017, se ordenó la suspensión de las actividades de este proyecto hidroeléctrico. Actores empresariales rechazaron la decisión judicial e iniciaron una campaña pública de presión dirigida a las altas cortes y autoridades ambientales, exigiendo seguridad jurídica para las inversiones. El 26 de mayo de 2017, y en medio de numerosos comunicados públicos exigiendo a la Corte garantizar la seguridad jurídica para las empresas y el desarrollo del país, la Corte de Constitucionalidad (CC) finalmente dictó una sentencia en la que admite que las comunidades indígenas no fueron consultadas, pero autoriza a la compañía a seguir operando durante un año más. Sin embargo, miembros de la comunidades en resistencia consideran que esta decisión contraviene los derechos de las comunidades: “(…) después que nos niegan la consulta con base en el Código Municipal, llega la sentencia donde reconoce la violación de los derechos en Cahabón, pero le da un año al MEM para hacer la consulta y a la empresa la deja seguir operando. Esto está en contra del Convenio 169 de la OIT”.

En medio de movilizaciones de rechazo por la decisión judicial, el 18 de julio, el Ministerio de Trabajo presentó una guía para la realización de la consulta previa a los pueblos indígenas. Esta guía fue igualmente rechazada por distintas organizaciones indígenas.

El otro lado del río II

Ante la suspensión de la consulta comunitaria autorizada por el alcalde, provocada por el recurso planteado por OXEC, las comunidades de Santa María Cahabón decidieron convocar una nueva consulta con las 195 aldeas del municipio, la cual se celebró el día 27 de agosto de 2017. El Ministerio de Energía y Minas (MEM) definió esta convocatoria como una consulta paralela carente de sustento legal. Sin embargo, el rechazo institucional resultó insuficiente para detener la consulta que se celebró en la fecha prevista y en la que 26.537 personas votaron en contra de los proyectos Oxec 1 y 2, y 11 personas votaron a favor. Aun así, El MEM continúa con la preparación de una nueva consulta que cuenta con el rechazo de algunas comunidades: El MEM está pensando hacer una consulta con las 11 comunidades, en cuanto ya hemos realizado nuestra propia consulta, de acuerdo con nuestros principios y valores como pueblos originarios. Piensa perjudicar nuestra lucha manipulando a la gente, diciendo que va a haber otra consulta, pero nosotros vamos a hacer valer la consulta que realizamos, respaldada por el Convenio 169.

Es preocupante el aumento de amenazas y ataques en contra de integrantes de la resistencia, a raíz de la celebración de la consulta del 27 de agosto: Yo recibí amenazas a través de insultos por teléfono. Me dicen que debo dejar la lucha, porque si no, me van a matar. Las empresas rechazan nuestras luchas. La empresa dice que las organizaciones no sirven, que las organizaciones son delincuentes. Nosotros no somos delincuentes, somos defensores de los DDHH y de la madre naturaleza. Le han disparado al COCODE de una comunidad, a otro le machetearon la puerta de la casa, a otro le trataron de incendiar la casa.

PBI estuvo presentes en la consulta comunitaria del 27 de agosto, de hecho este fue el inicio de nuestro acompañamiento a la Resistencia Pacifica de Cahabón.